En publicaciones anteriores, ya hemos visto los distintos tipos de residuos peligrosos y su normativa, así como el reglamento ADR que rige para el transporte por carretera de mercancías que supongan un riesgo (sean desechos o no), e incluso explicamos también el rol que tienen los gases inertes a la hora de neutralizar amenazas de incendios y explosiones en los tanques de combustible.
En este post nos vamos a centrar en la importancia de inertizar residuos peligrosos, y en las soluciones que aporta Rafibra en este ámbito a las estaciones de servicio, u otros clientes con depósitos de combustible en sus instalaciones que precisen ser inertizados al final de su vida útil.
¿Qué es la inertización de residuos peligrosos?
El término ‘inertizar’ es un neologismo que pese a no existir en el diccionario de la RAE es comúnmente utilizado a nivel técnico para designar la acción de dejar inactivo un residuo peligroso, anulando la potencial amenaza que pueda suponer, ya sea para las personas, el medioambiente o los dos.
La inertización de residuos peligrosos sería el proceso por el que se neutralizan esos desechos, y habitualmente consiste en la reducción de su reactividad por la vía de la transformación en materiales más estables y seguros, que no liberen sustancias nocivas a la atmósfera y tampoco tengan riesgo de incendio o explosión.
Métodos más comunes para inertización de residuos peligrosos
En función de la naturaleza de los residuos y el tipo de riesgos que acarreen se aplicarían distintos procedimientos de inertización:
- Solidificación: implica el uso de materiales de relleno como cemento, arcillas o cal para encapsular el residuo peligroso. El resultado es un compuesto sólido que limita la movilidad de los contaminantes. Tradicionalmente para inertizar los residuos peligrosos remanentes en los tanques de combustibles que se van a dar de baja se recurre a un material como el hormigón o incluso la arena. Aunque en Rafibra utilizamos una espuma especial que ofrece varias ventajas, como detallaremos un poco más adelante.
- Estabilización: similar a la solidificación, pero enfocada a alterar la química de los residuos. Para ello, se añaden reactivos químicos que varíen la composición del residuo, y que este sea menos soluble y móvil.
- Vitrificación: en este caso, los residuos son convertidos en un material tipo vidrio mediante la exposición a altas temperaturas. El método es particularmente efectivo para residuos altamente tóxicos, como es el caso de los derivados de metales pesados.
Estos procedimientos se aplican a una variedad de residuos peligrosos, incluyendo desechos petrolíferos, industriales, químicos y hasta materiales radiactivos en ciertos contextos, que serían los más complejos de inertizar.
Fuera del ámbito de la neutralización de residuos peligrosos, tendríamos la inertización gaseosa, una técnica específica para manejar y almacenar sustancias volátiles y peligrosas, aplicada por ejemplo cuando se inyectan gases inertes como el nitrógeno y el CO2 para reducir el riesgo de explosión e incendios en tanques de hidrocarburos.
También, hay que tener presente que si bien la inertización reduce significativamente el riesgo de exposición a los residuos peligrosos, no elimina completamente la toxicidad de los materiales. De ahí que, más allá de efectuar la mera neutralización, haya que seguir siempre escrupulosamente la normativa relativa a los desechos que entrañan cualquier riesgo. Para los de tipo petrolífero contenidos en depósitos regiría la Instrucción Técnica Complementaria MI-IP06, que establece todo el procedimiento para dejar fuera de servicio los tanques de almacenamiento de productos petrolíferos líquidos.
¿Qué hacemos en Rafibra para la inertización de residuos peligrosos petrolíferos?
En Rafibra usamos un material innovador para inertizar los desechos de combustible en los tanques de combustibles que se van a dar de baja, unos residuos cuya peligrosidad estribaría en su toxicidad, por lo que conviene neutralizarlos dado el riesgo de fugas con efectos perjudiciales para las personas y el medioambiente.
El material que empleamos para la inertización de estos residuos peligrosos es una espuma elaborada a partir de una resina de la familia de los aminoplásticos, de eficacia más que acreditada en su uso por empresas especializadas en este ámbito de varios países de Europa.
Al margen de sus propiedades para la inertización, la espuma por sus capacidades en absorción de residuos de hidrocarburos tiene asimismo un rendimiento probado a la hora de neutralizar hipotéticas fugas que puedan producirse. Algo esencial, particularmente si se trata de tanques fuera de servicio que están almacenados en instalaciones ubicadas cerca de zonas habitadas.
Además de materiales innovadores para inertizar residuos peligrosos petrolíferos, desde Rafibra también aportamos el buen hacer de los mejores profesionales, especialistas con mucha experiencia en este tipo de procedimientos que cuentan con la habilitación requerida, el permiso PPL III, que autoriza efectuar trabajos de esta índole.
Asimismo, no solo llevamos a cabo inertizaciones de residuos para dar de baja depósitos de combustible, ya que además abarcamos todo lo relativo a la gestión de desechos petrolíferos, como por ejemplo los lodos resultantes de la mezcla de agua y combustibles.
En el ámbito de la gestión, nuestros clientes se benefician de una cobertura integral que abarca extracción, recogida, transporte, trámites documentales, y hasta incluso la dotación de contenedores y etiquetas.
No dude en comunicarnos si desea que le informemos más en profundidad sobre las soluciones que aportamos para inertizar residuos peligrosos o gestionarlos. ¡Estaremos encantados de atenderle!
